... hace
pendejadas en estos días.
Anteriormente, para evitar confusiones, lo que se conoce como
anfibología, en algunos casos los pronombres y determinantes demostrativos se acentuaban.
Determinantes y pronombres demostrativos:
los pronombres éste, ésta, ése, ésa, aquél y aquélla, así como sus plurales, llevan tilde para diferenciarlos de los determinantes equivalentes.
Los determinantes este, esta, ese, esa, aquel y aquella y sus plurales no llevan tilde nunca.
esto, eso y aquello no llevan tilde nunca, puesto que son siempre pronombres.
Hay que tener en cuenta que nunca llevan tilde los pronombres demostrativos que actúan como antecedentes de un pronombre relativo sin coma interpuesta entre ambos.
¡Ahora resulta, que mejor no! Que mejor ya no los acentuamos pues en realidad no causan confusión.
Yo, que en la primaria tuve a bien memorizar, aprender y hasta algunas veces corregir esta regla a mis amiguitos, me siento perturbada.
Si se supone que la RAE va en búsqueda de una buena ortografía, ¿por qué hacer un cambio tan dramático e innecesario?. Ahora toda la gente que trabajaba con esta regla seguirá usándola y los que nunca supieron siquiera de qué se trataba, ni siquiera se van a dar cuenta de que ya lo hacen bien.
Hablo desde mis sentimientos: Me gusta que el español tenga muchas reglas ortográficas, lo engrandece, lo hace elegante. La escritura adecuada, la buena ortografía, queda en manos de gente culta. Me gusta que se conserven las reglas y el buen uso.
Estoy de acuerdo con la regla de la lingüística que dicta que "El uso marca la regla", que no hay lenguas altas o bajas... pero también creo que sí hay gente que nunca se ha preocupado por escribir bien, por cuidar su lengua, y que por esas personas, el español está sufriendo cambios denigrantes.
Yo por mi parte, me voy a morir como los que se murieron acentuando "fué", con mis reglas ortográficas en el corazón.